“La última canción” se estrena en nuestros cines tras una telenovela. Luego de que la distribuidora había cancelado su llegada, al ver el reclamo popular a través de correos y redes sociales, tuvo que echar pie atrás de su decisión y reubicarla en la parrilla cinematográfica, para regocijo de, en gran medida, los fans de Miley Cyrus.
Está dirigida por Julie Anne Robinson, escrita por Nicholas Sparks (“The notebook”, “Querido John”) y protagonizada por Miley Cyrus (“Hannah Montana”), Greg Kinnear (“Mejor imposible”, “Pequeña Miss Sunshine”) y Liam Hemsworth (hermano chico del futuro protagonista de la esperada y anunciada “Thor”). Podría contarles tantas copuchas sobre la elección de los actores, pero me salgo con la más conocida: Hemsworth es el pololo actual de la Cyrus desde el año pasado. Así que está en la película exclusivamente por su talento.
Robinson dirige su primera película con distribución mundial y no cumple a cabalidad las expectativas que generó su pomposo anuncio con la estrella adolescente. Este es un drama romántico, pero separado. Hay drama, y romance, en dos historias que cada vez que se intenta enlazar parece más forzado que cuando yo digo que no gracias, con un plato quedo bien. El argumento es el siguiente: chica de ciudad cosmopolita (Cyrus) se va de vacaciones a la casa de su padre (Kinnear) con su hermano chico (Bobby Coleman). Él ama a su padre, ella lo odia porque los dejó botados cuando más chicos. Ella conoce a un chico musculín (Hemsworth), pero se hace la difícil. Musculín agujonea incansablemente hasta que le resulta. Fin. Jajaj. No. Eso es solo el comienzo.
La historia se presenta durante la primera mitad como una comedia/drama romántico juvenil. Y para los fans de Cyrus puede funcionar; salvo que es melodrama en realidad, con giros sin sentido y con personajes medios bipolares para tomar decisiones. Esta es la mitad light, con algunos intentos de parecer graciosa, pero que en una hora sólo me sacó un “ja”. Y el problema es la historia y cómo ésta se desarrolla, porque la comunión entre los personajes es bastante natural y fluida, pero de profundidad nada. La segunda parte es mejor. El giro de los personajes frente a una situación determinada logra sorprendernos con un drama bastante absorbente y estremecedor en un momento, entregándonos un clímax que -al menos yo -no esperaba, pero que ayuda enormemente a la cinta a no ser tan olvidable. Si le ponen atención a la primera escena descifrarán un misterio antes que lo digan en la película.
Esto último hace que aflore una Miley Cyrus tan empática con su personaje que me olvidé por un momento que toda la primera mitad “The last song” era como estar viendo un capitulo larga duración de “Hannah Montana”. Kinnear, como es regular, cumple con una sobria interpretación, y con quien más me sorprendí fue de Coleman, tanto que tuve que googlearlo y me dije luego “¡Cómo tan tonto no haberlo reconocido!”, porque es el protagonista de “Un niño de otro mundo” (“Martian Child”) y me conmovió tanto con su actuación junto a John Cusack en esa película. Mi error. La ambientación de la playa ayuda a darle frescura a la historia, la música también –aunque Ud. no lo crea Cyrus aparece en la banda sonora –ofreciendo un cóctel de pop juvenil con baladas y temas movidos.
“La última canción” nos muestra una historia lineal, simple, con romance juvenil, drama familiar, lo cual será muy agradecido por las fans de Cyrus, y también por muchos padres que acompañen a dichas fans. Una película entretenida y emocionante, pero para ese público en particular.
Nota: 6/10.
yo quiero verlaaa!!!! *_* y la cancion se llama when i look at you es tan linda jajajajajaj
ResponderEliminarJajajaja. Casi no llega la pelicula. Ojalá que le vaya bienpara que no la saquen la otra semana
ResponderEliminarLa sacaron a la semana D:
ResponderEliminarSip, la pelicula la trajeron a la mala. Tuvo poca asistencia de publico, asi q a la priemra la sacaron.
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